La presencia tan avasalladora de coches americanos en Classicauto
2013 me ha obligado a escribir un post especialmente dedicado al despliegue de la
armada motorizada estadounidense, a pesar de que en el post
genérico sobre la feria ya aparecen algunos modelos yankis.
Lo que me gusta
de la mayoría de los coches americanos es el exceso y la decadencia que emanan.
En ocasiones son tan excéntricos que resultan hasta dignos. Así que... Hi-yo,
Silver, awayyyyy!!!!
Empezamos con un Pontiac Coupé que parece ser del 39. Un
modelo que resulta hasta discreto comparado con lo que nos espera. No me digas
que las parrillas frontales no son primorosas :)
Comienza el capítulo de los dinosaurios con un Pontiac RHD
Silver Streak del 52 ¡Hicieron falta dos portaaviones desguazados para
construirlo!
Ahora le toca el turno a un excesivo Cadillac, también de
los 50, con sus correspondientes detalles.
Este Ford Thunderbird parece que es de 1960 ¡Cuántas
lágrimas de emoción envidiosa habrán mojado de esta carrocería!
Otro clasicazo: detalle trasero de un Ford Fairlane
sesentero
Este impresionante Chevrolet Impala del 63 se vendía por
19.000 euros ¡No habría sido una mala adquisición!
Este tremendo Plymouth Barracuda (Cuda) de más de 400 CV ya
apareció en el post de ¿Qué
coche de Classicauto 2013 habría comprado?
No hay coche familiar americano más típico que este, pero es
que su tamaño era tan increíblemente parecido a un transbordador espacial (todo
el mundo que pasaba por su lado alucinaba) que ni me acuerdo del nombre ni del
modelo ni nada. El coche que está a su lado y que parece un utilitario ¡Es un Mercedes! Con este monstruo amarillo se podrían reconstruir 8 torres gemelas. También se
vendía ¿Por cuánto? ¡Qué más da, se me borró el cerebro al verlo y además no
existe en España ningún aparcamiento donde tenga cabida este homenaje al
espíritu americano!
Los clásicos se van modernizando: este Ford Mustang II 2800 V6
del 78 es muy similar al que conducía Farrah
Fawcett en Los Ángeles de Charlie y se vendía por 7.800 euros ¡Otra buena
adquisición!
Acabamos con el espíritu americano hecho coche: ¡señoras y
señores, descúbranse ante Su Majestad el Chevrolet Corvette Sting Ray de los 70!
¿El post ha sido lo suficientemente excesivo? Pues ya sabe: ¡las reclamaciones al maestro armero!
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